LOS MUNDOS PERDIDOS DE ALISON BLIX
Alison es una niña solitaria que, desde la extraña desaparición de sus padres ―dos arqueólogos americanos―, vive aburrida en una mansión en la ladera del Tibidabo. Está bajo la vigilancia de su abuelo, un rico industrial afincado en Barcelona a quien todo el mundo llama Mr. Pinkus.
Mr. Pinkus intenta mantener a Alison ―que ha cumplido doce años― alejada de todo lo relacionado con el misterio. Desde que sus padres no regresaron de una expedición en busca de los vestigios de Thule, uno de los mundos perdidos, ha clausurado el estudio de los arqueólogos en el sótano de la mansión.
El descubrimiento de la llave de la enigmática «cámara cerrada» cambiará para siempre la vida de la protagonista. Mientras su abuelo duerme, Alison entra en la cámara con la esperanza de hallar el rastro de sus padres. Entre cientos de carpetas llenas de informes y fotografías sobre los «mundos perdidos», la protagonista encuentra una cuerda con extraños signos y un cuaderno manuscrito.
Este último es El diario de medianoche, escrito por sus padres justo antes de su desaparición. Alison lo lee bajo la luz de la luna, como sugiere una nota de aviso. Allí averiguará que sus autores han logrado encontrar la entrada a Thule, el continente perdido que unía India y Australia.
El manuscrito termina con una nota personal con indicaciones para que Alison se pueda reunir con ellos. La joven protagonista esperará a partir de esa noche el momento de la partida, sin imaginar que está a punto de emprender un viaje a un mundo lleno de peligros, magia y personajes extraordinarios.